El
Capitán Paul Watson, de la organización ecologista Sea Shepherd
Conservation Society, quien ha denunciado que Costa Rica es uno de los
países más destructivos de tiburón del planeta, fue detenido en
Alemania.
Watson,
de gran prestigio por combatir a los pesqueros de ballenas y tiburones
en todos los mares de la Tierra, tiene pendiente un proceso judicial en
Costa Rica, desde el 2002, cuando pescadores lo denunciaron por
supuestos disparos, cerca de Isla del Coco, cuando faenaban en esas
aguas.
En
el 2009, con motivo de la captura de tiburones, sin aletas, en un
puerto de México, aseguró que en el puerto de Puntarenas “la mafia del
aleteo de tiburón controla la policía y los juzgados, tiene comprados a
los políticos locales y tentáculos que deslizan su corrupción en las
burocracias del gobierno en San José”.
En la denuncia, publicada por http://bloglemu.blogspot.com/2009/06/tiburones-drogas-mentiras-y-corrupcion.html,
Sheperd aseguró que ha observado como la población de tiburones ha
disminuido a un ritmo alarmante en aguas de Isla del Coco y a lo largo
de la costa de Costa Rica.
La orden de captura internacional contra Paul Watson,
fundador de la embarcación Sea Shepherd, fue emitida desde el 14 de
junio del 2004 por el Tribunal Penal de San José cuando Watson no se
presentó a juicio.
El canadiense fue detenido en Alemania,
según informaron hoy las autoridades de ese país. El capitán enfrenta
aquí una causa por el delito de peligro de naufragio, sancionado con
hasta 15 años de prisión, según dispone el artículo 251 del Código Penal.
El
capitán está bajo la custodia de los Tribunales alemanes, y en la
Cancillería tica se tramita un proceso para solicitar la extradición.
Y como decían antes, no podemos dejar de tener malicia indígena y preguntarnos: Si Figueres robó, se fue, la causa caduco y volvió llorando por tamales, por que no se olvida una causa insignificante contra alguién que viene a luchar por la naturaleza del país?
La pregunta es: a los intereses de quién responde nuestro país y cancillería con este actuar? tal y como lo denuncia el propio Paul Watson?
"El alcance de esta actividad criminal puede verse en la reciente
incautación por parte de las autoridades mejicanas de una tonelada de
cocaína hallada en los cuerpos congelados de los tiburones a bordo de la
nave de mercancías Dover Strait. Los tiburones congelados fueron
cargados a la nave en Puntarenas, donde la industria ilegal del shark
finning opera abiertamente y sin intervención policial."
Lo más indignante del caso viene cuando vemos la suavidad y alcahuetería del país y las instancias judiciales con los verdaderos criminales, como el caso del dueño del pesquero Hung Chi Fu XII que pagó
¢62 millones tras aceptar en una audiencia de conciliación la pena
impuesta por infringir la Ley de Pesca en lo referente al aleteo de
tiburón.
El acuerdo se firmó el pasado 19 de abril, cuando los
propietarios orientales de la embarcación, con bandera de Belice,
entregaron el dinero y retiraron el navío, que permanecía en depósito
judicial desde el 2 de marzo del 2011.
Esta
resolución, calificada por el fiscal ambiental Luis Diego Hernández
Araya como un gran acierto, se tramitó en el Tribunal de Flagrancias
de Puntarenas, y es la primera sentencia condenatoria importante que se
logra por pesca ilegal luego del fallido intento de sancionar el barco
Tiuna, interceptado en enero del 2008 pescando en las aguas protegidas
de Isla del Coco, y que generó un sentimiento de frustración entre los
acusadores.
La pregunta es: a quién sirve la ley de Costa Rica, a quiénes protegen la naturaleza, o a las mafías que mercadean con nuestros recursos naturales? Qué le deja más a un político o un juez? La naturaleza o las mafías?
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