Por Sofia.
Recuerdo la angustia que me provocaba no poder cantar canciones en inglés cuando era chica. A los siete años llenaba cuadernos con letras de canciones "como se pronunciaban", por lo necesario que resultaba para mí imitar lo que la banda estaba diciendo. Imitar, no entender. Sentir, no conocer. Así comencé a garabatear shilovsyus y lovmidús. Un deseo profundo por ser parte de la música que me gustaba, por conjugarme con ella, me orilló a buscar alternativas a la comprensión y el dominio de un lenguaje: más allá de eso, logré tener lo que en ese entonces no conocía como experiencia estética, sino como sensaciones incomprensibles en la piel y el alma.
La sensación volvió hace unos años cuando escuché por primera vez una canción de Sigur Rós. Recuerdo las circunstancias perfectamente, pero eso a nadie le importa. Baste decir que la infantil angustia regresó: no comprendía una palabra. Y sin embargo, ¿por qué su música se sentía tan cercana, tan familiar, tan propia?Sucede intuitivamente: buscamos significados y sentidos. Rastreamos desesperadamente una razón por la que los hechos son como son y no de otra manera. Pasamos horas y días justificándonos frente al mundo, afirmando que lo que ha pasado necesariamente tiene sentido. Pero de vez en cuando, de forma deliciosamente esporádica, sucede algo que nos arranca del torrente de la razón y nos entrega a un placer genuino; uno en el que no nos preocupamos por el significado de lo que sucede alrededor, ni por su relevancia racional. De vez en cuando y de manera deliciosamente esporádica, conocemos a una banda como Sigur Rós.
En Reykjacik, Islandia, alrededor de diciembre de 1994, Jón Þór Birgisson y Ágúst Ævar Gunnarsson (que eventualmente abandonaría la banda) formaron Sigur Rós. Este nombre no es otra cosa que una sencilla adecuación: la hermana del vocalista Jón Þór Birgisson nació por la misma época en la que ellos nacieron como banda. Ella fue nombrada Sigurrós y ellos aprovecharon para bautizarse Sigur Rós, que puede traducirse como Rosa de la Victoria. Aunque comenzaron a componer rápidamente, su primer disco tardó tres años en realizarse, entre otras razones, por los problemas económicos que tenían; para pagar al estudio donde grabaron tuvieron que pintar sus instalaciones. Finalmente, Von vio la luz en septiembre de 1997, con un éxito moderado; al siguiente año aparecería Von Brigði, con remixes del disco anterior. Este disco tuvo éxito en Islandia, quizá en parte porque la ayuda de Gus Gus estaba de por medio.En 1999 Sigur Rós llegaron a un punto de popularidad significativo: con su álbum Ágætis Byrjun alcanzaron su segundo disco de platino, en un país como Islandia quiere decir que una de cada quince personas lo tiene. También en este año comenzaron a llegar a oídos americanos y muchas disqueras pelearon por la publicación de Ágætis Byrjun.
En este momento Sigur Rós ya podía fácilmente definirse como una de las bandas más importantes a nivel internacional. Para cuando apareció Takk en el 2005, todo el mundo esperaba escuchar lo que tendría que ser forzosamente un clásico. Dudo que alguien hubiera quedado decepcionado. Si aquel regreso a los juegos infantiles había quedado sugerido como posibilidad en ( ), Takk llegó para marcar contundentemente que la libertad de un niño puede obtenerse en cualquier momento. Hoppípolla, una de las canciones del disco de mayor alcance (quizá debido a su toque profundamente popero, pero no por eso menos dramática), muestra en su conmovedor video a un grupo de ancianos jugando a ser niños y jugado como niños. Glósóli, por su parte, retrata la travesía de (otra vez) un grupo de niños que se dirigen a un espacio abierto y liberador. Estos dos vídeos son ejemplos claros de la importancia que los miembros de Sigur Rós conceden a la representación visual de su música; no es de sorprenderse que el arte de cada uno de sus discos sea tan cuidadoso como bello. Takk trajo consigo una extensa gira; hacia el 2006 Sigur Rós regresaron a su lugar de origen, Islandia, para hacer una serie de presentaciones gratuitas. El resultado: el primer DVD en vivo de la banda (que incluye además entrevistas y material visual impresionante), el nombre que recibió fue Heima.
Así, con un regreso al hogar, nos hacen partícipes de aquello que consideran como propio, su patria, su lugar de origen. Y es que muy probablemente seamos incapaces de hablar o entender islandés o hopelandic; pero cuando se está frente a lo que va más allá de las palabras, los significados y lo sentidos, el lenguaje verbal es lo que menos importa. La música que te vuelve uno solo con el mundo flota al alcance de todos los que estén dispuestos a adoptarla como propia y convertirla en su patria y su lugar de origen.
OJO CON ESTE ULTIMO!
Volvamos a ser niños!
10 comentarios:
Toda una experiencia estética...
Muchas veces las palabras salen sobrando...
Ai laic a lot dis post, ai goin tu estoul dat
Realmente inspirador. Gratificante! desde hoy en mis favoritos! Músicos y artistas!
Wow!! Se esucha excelente, sin entender nada me transportó a otro 'mundo'.
Voy x música de Sigur Rós..........
El grupo es excelente, de verdad no hace falta entender lo que dicen, con sentirlo basta..
Impresionantes videos, maravillosamente realizados, lo de los niños que se tiran a volar, el último me dije, solo falta que se caiga, y dicho y hecho.
Bella música me relajaron esos videos.
Saludos
bello articulo, cuando empece a leerlo recien acababa de comprar y descargar "vid spilum endalaust" y debo decir que fue una experiencia hermosa, no son necesarias las palabras cuando es el alma quien te habla
excelente post
Realmente te felicito.
En tu articulo has logrado la casi imposible tarea de concretizar una experiencia estética tan potente como es la que se consigue 'dialogando' con Sigur Ros.
La propuesta estética del grupo es incabarcable en la medida que pretende irrumpir con la referencialidad del lenguaje, considerandolo a este como una vía fluida para expresar sensaciones y sentimientos; el resultado de esu propuesta está claro...
eg var ad leita ad, takk
Yo tambien escucho a sigur ros y como no entiendo lo que dicen solo invento palabras. Que hermoso es poder inventa tu propia música
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