Matar o morir… ¡He ahí el dilema!

Maguila gorila, reportero de calle del Buhonero Venezolano, en otra exclusiva entrevista, presenta en esta crónica la historia verídica de Benito, ex integrante de la banda de Don Gato. Hoy, nuestro protagonista tiene ya unos 15 años solo, nos cuenta como la justicia lo margino y solo un acto criminal final lo libero de la tragedia de seguir siendo uno más de los pobladores nocturnos de la calle.

La ingenuidad que lo caracterizaba quedo reducida a la memoria. Benito acota que no trata de reproducir el pasado, sino de acabar con el. Su memoria apunta a sus fracasos, a ser un perdedor, de los que han quedado en la cuneta del progreso, en una palabra, se siente victima de la historia de su vida. Solo sabe caminar sobre ruinas y cadáveres. Su memoria evoca esta única oportunidad donde termino de una vez con sus pesares.

Benito tiene en su haber unos 35 muertos. A los 8 años le robo el arma de reglamento al policía metropolitano Matute (aquel que cuidaba el callejón). La guardo hasta la noche. Cuando llego el gallo Claudio, marido de su mamá, la saco y le apunto, le dijo: “sino te vas te mato y si le vuelves a pegar voy a matar a tu mamá”.

Benito se queda con la mirada vacua, da miedo la expresión de su cara, de pronto parece regresar a la realidad que le rodea. Dice: “yo no duermo, si lo hago vienen los de la banda de Blanca nieves y los siete enanos y me mata. El que trabaja todos los días esta sentenciado”. Con los ojos húmedos y una mueca de rabia resentida, Benito me confía su fantasma más brutal que le atormentaba en los momentos de debilidad. “Hace dos años, se me fue un tiro sin querer y le di a una chamita de 5 años. Ese día lloré, porque eso pasó y yo no quería. Te lo juro. La carajita era la prima de mi jeva Candy Candy, era como si fuera su hermanita”.

Benito continúa revolviéndose en sus miserias. “La familia se respeta. No es lo mismo quebrar a uno que quiere darte por una culebra pendiente, que matar al vivo que quiere sacarte la jeva. El que mire a mi Candy Candy se muere, la jeva de uno se respeta, por eso le desmadré la vida a ese sifrino de Johny Quest”.

“Mi jeva, Candy Candy, me compra la ropa que es lo que a mi me gusta. Antes iba yo mismo, ahora no puedo Blanca nieves y los siete enanos me acechan en el barrio. Me quedo tranquilo y espero a que mi jeva llegue. También me compra la comida y las tarjetas de los teléfonos. A mi me gusta la salsa, nos tomamos algo y bailamos los dos solitos. Hacemos nuestra vainita, no relajamos, todo sin peo”.

“Batz Maru me dijo que me mete a las misiones, para que me salga de esto. Que venda los hierros. Eso seria quedarme sin tener como trabajar, listo para que Blanca nieves y los siete enanos me hagan parrilla. Yo no voy a estar jalándole bolas a unos carajos que son peor que yo para que me den 400 mil bolos al mes. Eso no alcanza para nada”.

“En Sin City están los 4 fantásticos, ellos atacan en los mercados. Quieren meterse a distribuir droga aquí. Yo ya les advertí que aquí no se vende más eso, por culpa de Birdman que hizo un tumbe ahora tengo la culebra con un poli sucre, El Fantasma del Espacio piensa que fui yo. Me juro no dejarme descansar. Va a haber muertos. Por eso yo ahora no tomo ni un palo, estoy todo el tiempo vigilando. Duermo dos o tres horas, es la única manera de que no me desparramen la azotea”.

Benito se incorpora y me comunica que ha terminado la entrevista. El quiere unos zapatos deportivos de última tecnología que tiene el Pato Lucas. La luz tenue del único bombillo del callejón, le arranca destellos azulados al acero en forma de pistola que ahora esta blandiendo en su mano. Se aleja sinuosamente por el callejón…Unos cincuenta pasos mas adelante, intercepta al Pato Lucas que regresa a su casa en el barrio orgulloso de sus zapatos “Niké Air Jordán VIII Retro Deluxe Especial Edition One Person Exclusive”.

- Cargas unos zapatos muy bonitos, dice Benito… ¿Dónde los compraste?...

- El Pato Lucas, sin muestras de sorpresa le responde… Son especiales. Te recomiendo que…

- ¡Quítatelos! Le ordenó Benito apuntándole con el arma.- Esta bien, le dijo el Pato Lucas serenamente… Pero te advierto que…

- ¡Cállate y sácatelos ya!, increpo Benito, un poco fuera de sí.

EL Pato Lucas, con mucha lentitud, se los fue sacando uno por uno, cumpliendo un ritual, los coloco frente a Benito como quien ofrece una ofrenda a un Dios pagano.

Un rato después, Maguila Gorila trata de salir de su asombro ordenando sus ideas en su cerebro por los hechos ocurridos tan rápidamente…El Pato Lucas, descalzo, a mi lado, me comenta… “lastima que no quiso escucharme”…

Benito, agarro los zapatos con extrema codicia y se los puso…

Los deportivos salieron corriendo arrastrándolo a él…

Más nunca lo hemos vuelto a ver…

Jeva = Novia.