Este post viene en un tiempo del mes dificil.
Un tiempo en el que algunas mujeres no sabemos que nos pasa pero el mundo se nos viene encima. De repente nos volvemos locas por un rato. Nos volvemos locas por unos 5 dias, todos los meses del año. TODOS!!
De pronto los vecinos son un monton de vinos desconsiderados, el amigo del messenger que no te contesto el saludo es un malparido (aunque compartieses con el su cumple hace tan solo unos dias, o aunque sea el padrino de tu hijo), tu madre -a la que tan solo el Sabado le celebrabas su “Feliz Dia de La Madre”- ahora es una sra. necia y sobreprotectora, tu jefe es un malagradecido y toda la ropa en el closet se vuelve una bola de trapuchos pasado de moda:
-“Cochinada! Yo no uso enaguas, ademas no me he depilado y que es este pantalon campana!!?? Hace como 6 años no se usan! Buaaaa!”… (sigue larga sesion de llanto inexplicable e infantil)
Para aquellos individuos que no saben lo que se siente, (los dichosos hombres) hagan de cuenta que estan en una de esas peliculas en que de repente volteas la mirada y todo mundo se ha convertido en demonio (si, si, como en Thriller!) y para colmo sentis que te estan haciendo una mamoplastia sin anestesia! (bueno si son hombres y no se han puesto tetas, que carajos van a estar sabiendo que puede doler una mamoplastia?!!)
Y sin darnos cuenta hacemos un combo entre quejamos, reirnos y llorar -todo junto y en dos minutos- entre pagar el pasaje del bus y quitarle el asiento a la ancianita que venia de pie. “Si, y que? Yo tengo los pies hinchados y ella ya ha vivido mucho” nos justificamos por dentro sabiendo que el Karma nos pisa los talones.
[+/-] Seguir leyendo...
Hacemos y decimos cosas horribles y despues nos sentimos como un perro mojado en medio Parque Central: feo, chiquitillo, hediondo. Pero es que no podemos evitarlo! El insoportable carrusel de emociones que nos regalan las hormonas en esos maravillosos dias -que confirman nuestros rezos de no estar embarazadas- son para filmarlos y verlos luego, con un full tarro de palomitas y gaseosa y reirnos nosotras mismas del caos que creamos a nuestro paso durante tan solo unos cuantos dias en que no nos aguantamos ni nosotras mismas.
Que pereza! Es lo primero que pienso. A veces ni cuenta me doy que esta sucediendo. A veces no se porque, estoy tan ocupada que paso esos dias sin percatarme mucho. A veces sin embargo, es tal el despelote emocional que Cinchona despues de las replicas es cualquier vara.
Lo peor de todo es que quienes pagan la cuenta son lamentablemente quienes menos quisieramos: El novio, la mama, el vecino, el perro, el niño y la mae del express. Pero, yo me pregunto, que hacian las mujeres de antaño para sobrellevar los ataques virulentos de la lloradera-colera-risa-neurosis que nos da durante esos dias del mes? Puede ud. estar seguro/a de que no habia Dorival, no exisita algo definido como el PMS (nuestra excusa salvadora para cuando contestamos feo o tomamos decisiones tontas y apresuradas), no habian toallas nocturnas, ni con alas, ni con super-proteccion y doble capa Super UtraLockSeguriGel para mas comodidad y comfort!!
Entonces?
Que hacian estas mujeres?
Como lograban salir vivas de los embates de semejante problema mensual?
Tal vez por eso fue que Elizabeth Báthory mato y torturo a ese monton de muchachas en su castillo? Seria por eso que Lorena Bobbitt se busco un ras-cuchillo y en un arranque de locura “acabo de raiz” con quien antes fuese “su mejor amigo”? Seria esa la razon por la cual la “Bridni Espiers” decidiera pelarse con la cero y agarrar a sombrillazos un carro? No seria nada raro. Las tres cosas me han pasado por la cabeza, en una que otra ocasion durante un ataque hormonal particularmente fuerte.
Pero no por eso somos zombies-come-personas durante ese tiempo especial del mes. Muchas sabemos que andamos fatal, nos sentimos cansadas, incomodas, adoloridas, por ratos tristes, por ratos euforicas de la felicidad y lo peor es que todo esto pasa sin razon aparente. Por momentos hasta ciertos deseos pecaminosos aparecen como burbujas demoniacas dentro de nuestras adoloridas cabezas. Pensamientos de los cuales hasta la mas mojigata se avergonzaria! Y para rematarla, inexplicablemente te agarra hambre! Un hambre BRUTAL que te pide cosas en especifico. Engordantes artificiales: chocolate, azucar, gaseosa. Y mas chocolate, azucar y gaseosa. Cual gimnasio ni cual dieta! Cual regimen ni cual tu tia! A mi traiganme un cuarto de Haagen Dazs o minimo una chocoleta Dos Pinos antes de que me ponga a dar vueltas y en vez de aparecer en el hermoso traje rojo con cacheteros estrellados, me convierta en el Demonio de Tazmania.
Es duro pero tampoco por esto pido clemencia: Se comportarme como una persona normal, aguantarme el ataque y tratar de funcionar como la mujer moderna, independiente y productiva que soy…solo que escribiendo este post me comi casi medio queque de chocolate que sobro del Domingo, llore cuando me llamo mi mama y me puso por telefono a mi hijo (quien tan solo se quedo una noche a dormir con su abuelita) y cambie de decision sobre mi futuro profesional unas 3 veces para terminar sin la menor idea de que voy a hacer cuando sea grande.
Y por eso tuve que escribir. Ven? Ya me siento mejor. Ahora vayan y le dan un masajito a su esposa o novia (si esta pasando por lo mismo) o dese un masajito en la nuca ud. misma mi querida lectora (o lector, porque no?). Despues de todo, no es cualquiera que sobrevive una hecatombe sin divorcios, heridos o muertos y con el maquillaje intacto.
Haz click ACApara comentar
